En una entrevista concedida a La Patriada, la diputada Natalia De la Sota se refirió a la tensión cambiaria y la racionalidad que debe aportar la dirigencia política. | Por Fabián Waldman
La sesión del martes pasado en la Cámara de Diputados dejó un saldo favorable para las expectativas planteadas por el oficialismo. Consiguió aprobar leyes como la de Alquileres con los cambios realizados en el Senado; el proyecto de Compre Sin IVA a partir del 1º de enero del año próximo, similar al reglamentado por el ministro Sergio Massa, y el impulso a la industria del Gas Natural Licuado y la industria del calzado.
La creación de tres nuevas universidades consiguió el beneplácito de los legisladores. Son las que funcionarán en Cañuelas y Salado, en la provincia de Buenos Aires; y el pase a universidad nacional de la entrerriana José Laurentino Ortiz, que el Senado deberá convalidar en breve. El Plan de Ciencia 2030 también es Ley, y propone el crecimiento del presupuesto al 8% del PBI para el final de la década fue de la partida.
Además, consiguió la media sanción por unanimidad la propuesta de la diputada cordobesa Natalia De La Sota. Se trata del Programa «Argentina Inclusiva», que abarcará a los tres poderes del Estado y busca incorporar la perspectiva de discapacidad desde el modelo social. De la Sota acompañaría luego con su mano la convalidación de las propuestas junto a su colega y compañero de bloque Alejandro “Topo” Rodríguez.
La Patriada conversó con la diputada durante la jornada y se refirió a la iniciativa, así como también a las declaraciones del candidato Javier Milei.
Una sesión con el quórum justo con un temario muy amplio: Ley de Alquileres, compre sin IVA, Discapacidad. ¿Cuál es su mirada?
Primero que nada, una reflexión sobre el quorum. Doy o no doy. ¡Qué jodido a veces en relación a los temas que hay que tratar! Más allá de eso, dimos quorum con todos temas muy importantes y yo, en particular, muy contenta. Haber logrado esta media sanción de Argentina Inclusiva nos obliga a formarnos a todos los agentes de los tres poderes del Estado en materia de discapacidad, que tanta falta nos hace. Como lo dije en el recinto, hemos escuchado manifestaciones terribles de algunas personas que quieren ser parte de la función pública, Incluso de quienes ya son. Y respecto de todos los otros temas, son todos muy importantes. Nuestro interbloque va a terminar de decidir ahora la marcha de algunos temas. Me parece que hay que tratarlos, dar el quorum, hay que discutirlos.
Se conocen expresiones de Javier Milei refiriéndose de manera despectiva hacia esos sectores y el ministro Sergio Massa acaba de anunciar la eliminación del trabajo en caso de percibir una pensión.
Es una gran medida. Tener una pensión no quiere decir que no pueda tener un trabajo. La gente con discapacidad puede y debe tener un trabajo. Y esa pensión cubre las necesidades y costos que significan las rehabilitaciones, los tratamientos, las prestaciones. A mí me parece una gran medida. Tenemos que aprender, lo más importante de todo esto es que todos podemos ser potenciales personas con discapacidad. Yo voy, cruzo la calle, me pisa un auto y puedo tener una discapacidad. Lo miso por enfermedad o por vejez. Empecemos a darnos cuenta y reconocer que nos cuesta mucho todavía a la sociedad en general abrazar y entender la diversidad. Me parece que eso es lo fundamental.
Son cinco millones los argentinos que están afectados. El senador Martín Lousteau se manifestó por una supuesta exageración en el número, gente que había que dar de baja porque estaban cobrando de más…
Hay que diferenciar también eso de lo que tenemos que tener: una pensión de un certificado único de discapacidad. Son cosas distintas, los números son distintos y por supuesto puede haber algunos que no corresponda. Pero eso no quiere decir que tengamos que poner en cuestión el trabajo de quienes controlan o la autoridad de aplicación. Hay una realidad: son 5.000.000 las personas con discapacidad aproximadamente, pero no todos tramitan el certificado. La estadística no es tan clara, cosa que hay que reparar. Pero números más, números menos, la realidad es que no abrazamos a la diversidad, al que es distinto; siendo siete mil millones de personas que hay en el mundo, o sea siete mil millones de diversidades. Entonces tenemos que aprender, tenemos que poner el corazón y aprender un poco.
Te llevo a la situación económica actual: las declaraciones de Javier Milei respecto a los plazos fijos y la respuesta de Sergio Massa, hablando de una irresponsabilidad y alentando la fuga de los depósitos en pesos.
Creo que tenemos que entender que las campañas y las coyunturas políticas no nos permiten ni debemos ser irresponsables, fanáticos. En los momentos de crisis, de grave crisis como tenemos, lo único que debemos aportar es racionalidad. Y más aún quienes tenemos alguna responsabilidad y más aún quien pretende ser Presidente.
Desde ese lugar cuál es tu opinión sobre lo que puede suceder hasta el domingo 22. ¿Cómo ves el trayecto en esta coyuntura económica? ¿Qué tendría que hacer el gobierno y que tendría que aportar el resto de la sociedad para tranquilizar?
Lo primero es la calma, la racionalidad. Creo que todos los sectores de la sociedad, los económicos, los actores sociales, políticos… lo primero y lo único que tenemos que hacer es aportar racionalidad en un momento de crisis grave, donde además la que más sufre, la que tiene la zozobra mayor es la vida de cada argentino.