Dic 07 2024
Dic 07 2024

El Gobierno decidió desregular el servicio de correos

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La medida había sido anticipada por el vocero presidencial, Manuel Adorni, y se publicó en el Boletín Oficial. En ese contexto, en declaraciones a FM La Patriada, un dirigente gremial de los trabajadores repartidores advirtió la situación de precariedad laboral en la que se desempeñan.

El Gobierno decidió desregular el servicio de correos con el objetivo de «lograr más competencia, mayor digitalización y mejor seguridad en materia postal», se informó oficialmente.

La medida fue hecha pública este lunes por medio del Decreto 1005/2024 publicado en el Boletín Oficial, aunque había sido anunciada este domingo por el vocero presidencial, Manuel Adorni, en su cuenta de X.

«El Gobierno ha tomado la decisión de desregular el servicio de correos. Con esta medida lograremos más competencia, mayor digitalización y mejor seguridad en materia postal. Dios bendiga a la República Argentina. Fin», publicó Adorni.

La determinación oficial acerca del servicio de correos también fue comunicada este lunes por Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado, en un largo posteo en X.

«A partir del 1005/24 no existe más un proceso de habilitación; cualquier persona jurídica que desee manejar correo podrá hacerlo y solo deberá informar que está involucrado en dicha actividad. En mensajería urbana también lo podrán hacer las personas humanas. No se necesitará entregar documentación ni comprobar la tenencia de vehículos u otras instalaciones; se caen todos los trámites de habilitación: el negocio pasa a ser libre», indicó el funcionario.

Y agregó: «La no exigencia de comprobar vehículos en mensajería urbana implica que cualquier actor podrá operar como punto de entrega y repartidor de envíos postales, facilitando el desarrollo del comercio electrónico y generando una fuente de ingresos adicionales para comercios, canillitas, remiseros y operadores de plataformas», destacó Sturzenegger.

El funcionario había publicado este domingo un provocador tuit cuando parafraseó una histórica frase de Evita Perón alterándola de este modo:

«Para cada necesidad habrá un mercado. VLLC!», escribió el ex funcionario del gobierno de Fernando de la Rúa.

Según publicó la agencia Noticias Argentinas, con esta decisión el Gobierno elimina «todos los vestigios de predominio postal y las exclusividades otorgadas a empresas de correo estatales referidas al envío de cartas documento, de telegramas y encomiendas de hasta 50 kilos, al abrir la competencia y facilitar el acceso de otros operadores».

El Correo Argentino había formado parte, en un inicio, de la primera lista de empresas estatales que la gestión de Javier Milei presentó en la Ley Bases para privatizar. Sin embargo, fue excluida de la última norma sancionada, junto con Aerolíneas Argentinas y Radio y Televisión Argentina.

El Correo Argentino cuenta con el Estado Nacional como único accionista y se compone una red de 1400 sucursales y postales.

Los riesgos que viven los repartidores en las calles

En declaraciones a «Pasos perdidos«, en FM La Patriada, Ezequiel, directivo del Sindicato de Base de Trabajadores de Reparto por Aplicación (SiTraRepA), destacó los riesgos que viven en las calles quienes recorren en motos, bicicletas y distintos vehículos las calles del país para entregar distintas encomiendas, algunas de ellas de correos no oficiales.

«La situación de los repartidores es critica. Trabajamos de una manera muy precaria, sin derechos laborales», explicó Ezequiel.

El dirigente sindical mencionó que en el último tiempo se registró «una caída del 40% de los pedidos«, lo que provocó que «a veces no tengamos más de un pedido por hora», indicó.

Además, mencionó que «debido a la recesión, que la plata no alcanza, y a los despidos, cada vez son más los repartidores en la calle. Para cubrir un salario medianamente digno, un repartidor necesita trabajar más de 12 horas por día de lunes a lunes«·

«Hay compañeros -relató- que trabajan más de 60 horas por semana por, alrededor, de 600.000 pesos. Eso suponiendo que durante la jornada laboral no te suceda nada», sostuvo Ezequiel.

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