Según distintas encuestas, Trump aventaja a Harris por 5% entre los varones y ella le saca 11% entre las mujeres. Esa última diferencia se eleva a 40 puntos entre las votantes de entre 18 y 29 años.
La vicepresidenta estadounidense y candidata demócrata a la Casa Blanca, Kamala Harris, y el exmandatario republicano Donald Trump (2017-2021) llegaron este martes a las urnas no solo con dos visiones opuestas para el país, sino con dos personalidades antagónicas que polarizan Estados Unidos.
Kamala vs. Trump, un mandato omnipresente y una vicepresidencia discreta
Trump gobernó a golpe de Twitter. Las redes sociales sirvieron de altavoz de sus políticas y ocurrencias, que llegaban a la población, muchas veces a horas intempestivas, sin el filtro de los medios tradicionales.
Su amplia exposición contrasta con el discreto rol desempeñado por Harris hasta que Joe Biden renunció en julio a la carrera a la reelección y ella le tomó el relevo. Ha estado tan a la sombra del mandatario que muchos ciudadanos la empezaron a descubrir en esta breve y acelerada campaña.
Pero la vicepresidencia, más que una ventaja, juega en parte en contra de Harris. Se la «culpa» por las decisiones de Biden y por no hacer durante su administración lo que ahora promete, explicó a la agencia de noticias EFE Tammy Vigil, profesora de Comunicación en la Universidad de Boston.
Trump intenta recuperar el poder con la intención de «arreglar» la situación del país tras estos cuatro años de gobierno demócrata. Tiene a su favor el aparente olvido de algunas de sus ideas más disparatadas, como la de tratar el coronavirus con una inyección de desinfectante doméstico, y el magnetismo superlativo de sus propuestas, resumidas en su lema «Hacer Estados Unidos grande de nuevo«.
El magnate neoyorquino goza de una base leal que no le penaliza ni sus errores ni sus causas pendientes con la justicia. «Ha establecido una relación con sus seguidores que le permite decir y hacer casi cualquier cosa sin alienarlos», explicó Vigil, para quien “sus mensajes permiten a la gente dar rienda suelta a sus peores impulsos y muchos lo agradecen”.
Harris tiene ante sí el reto de demostrar que puede asumir el mando. Según Tom Hollihan, profesor de Comunicación en la Escuela de Comunicación y Periodismo USC Annenberg, tiene de su lado su experiencia como abogada, fiscal general de California, senadora y después vicepresidenta, además de mostrar empatía hacia gente diferente a ella.
Harris cumplió en octubre 60 años y Trump en junio 78. Cuando el candidato demócrata era Biden, de 81, las críticas a la avanzada edad y a sus efectos sobre la capacidad física y mental de un aspirante iban dirigidas al presidente, obviando prácticamente que su rival republicano solo era tres años menor.
En tanto, Harris podría ser la primera mujer, la primera afroamericana y la primera persona de origen sudasiático en llegar a la Casa Blanca. Aunque en cierta manera hace que más gente pueda identificarse con ella, también son factores que constituyen barreras a su candidatura.
Donald Trump aventaja a Kamala Harris por 5 puntos porcentuales entre los hombres y Harris le saca 11 puntos entre las mujeres. Esa última diferencia se eleva a 40 puntos entre las votantes de entre 18 y 29 años, anticipa un sondeo reciente de la cadena ABC News.
Los hombres, según Hollihan, parecen responder a la «tosquedad» de Trump, «su estilo machista y su percibida ‘dureza'».