Por Franco Ojeda
El ex funcionario macrista creó junto a dos socios una empresa que, en poquísimo tiempo, obtuvo la posibilidad de llevar a cabo la explotación hidrocarburífera en la cuenca neuquina gracias a la desregulación que el Gobierno llevó a cabo en materia de energía y el asesoramiento del estudio de abogados que redactó la Ley Bases.
Javier Iguacel, ex secretario de Energía y ex intendente de la ciudad bonaerense de Capitán Sarmiento, fue uno de los primeros dirigentes políticos, en este caso enrolado en el PRO, en aprovechar las políticas de desregulación del gobierno nacional en materia de energía para adquirir y explotar, mediante una empresa creada para la ocasión, pozos petroleros que estaban a cargo de Yacimiento Petrolíferos Fiscales (YPF) en Neuquén, gracias a una operatoria en la que contó con el asesoramiento de un estudio de abogados influyentes en el gestión de Javier Milei.
«Creamos Bentia Energy para impulsar el desarrollo energético de Argentina. Pondremos todo para crear trabajo y prosperidad. ¡Orgullosamente independientes y argentinos!”, anunció Iguacel el 31 de agosto pasado en su cuenta de X.
Creamos Bentia Energy para impulsar el desarrollo energético de Argentina. Pondremos todo para crear trabajo y prosperidad. ¡Orgullosamente independientes y argentinos! 🇦🇷💪 pic.twitter.com/9BO5f0ZgEx
— Javier Iguacel (@JavierJiguacel) August 31, 2024
De acuerdo al Boletín Oficial, la empresa de Iguacel fue creada el 1 de julio pasado con un capital inicial de apenas 30 millones de pesos -tomando en cuenta las inversiones que se ponen en juego cuando se habla de energía- con la finalidad de dedicarse a «la exploración y la explotación de los yacimientos de hidrocarburos líquidos y/o gaseosos y demás minerales, generación de energía en todas sus formas, como asimismo, el transporte, almacenamiento, tratamiento y comercialización de estos productos y sus subproductos derivados directos e indirectos, así como también realizar cualquier otra actuación complementaria de su actividad extractiva, industrial, de generación de energía, y/o comercial o que resulte necesaria para facilitar la consecución de su objeto».
Junto Iguacel aparecen Lisandro Garmendia, expresidente de TB Cargo, una empresa de logística que opera a nivel nacional e internacional, y Lucas Logaldo, exjefe de Gabinete del Ministerio de Energía durante el gobierno de Mauricio Macri y operador político del PRO en Mar del Plata.
Bentia Energy fue fundada con el objetivo de explotar pozos petroleros maduros, aquellos que alcanzaron su pico máximo de su producción de hidrocarburos y entraron en una etapa de declinación.
A menos de dos meses de su creación, Bentia adquirió seis pozos petroleros del Cluster «Neuquén Norte«, que comprenden las concesiones de explotación convencional «Señal Cerro Bayo«, «Volcán Auca Mahuida«, «Don Ruíz» y «Las Manadas«.
Para la adquisición de estos clusters petroleros, Bentia contó con el asesoramiento del bufete de abogados de Bruchou-Funes de Rioja, que tuvo una participación clave en la elaboración y redacción de, por lo menos, el capítulo de Legislación Laboral de la Ley Bases, que fue aprobada el 28 de junio en el Senado, y del blanqueo de capitales.
«Bruchou & Funes de Rioja actuó como asesor legal en la estructuración de Bestia Energy S.A. y su posterior adquisición del Cluster ‘Neuquén Norte’ en el marco del proceso competitivo ‘Proyecto Andes‘, lanzado por YPF S.A. para la venta de sus campos maduros”, indicó el estudio de abogados en su sitio web.
El proyecto Andes fue lanzado en abril y tiene la finalidad de vender 55 pozos petroleros maduros localizados en Mendoza, Neuquén, Santa Cruz, Tierra del Fuego, Chubut y Río Negro.
El proceso de venta está a cargo del Banco Santander e YPF tiene como objetivo obtener por la operación más de 800 millones de dólares. A su vez, desde la empresa petrolera indicaron que harán mayor hincapié en los pozos de Vaca Muerta.
El director del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), Hernán Letcher, dijo a La Patriada Web que «el principal determinante para operar» estos pozos «es el precio internacional. El riesgo, entonces, es que sin barril criollo, y con desregulación absoluta del sector, una eventual baja del precio internacional deriva en la imposibilidad de las empresas chicas de sostener la operación».
A su vez, Letcher explicó que «las pymes, probablemente, operen los pozos con las estructuras existentes, con lo cual difícilmente absorban el personal que YPF deje de tener a cargo, con el impacto en términos de empleo en cada jurisdicción» que eso significa.
El economista, además, remarcó el impacto ambiental que provocará esta medida y aseveró: «Para darle mayor rentabilidad a la explotación, las pymes reducirán los estándares de operación. Esto es riesgo de seguridad y medio ambiente«, indicó.
De la política a las petroleras
Nacido en 1974 en la ciudad de Capitán Sarmiento, Iguacel es ingeniero en Petróleo recibido en el Instituto Tecnológico de Buenos Aires. El actual empresario petrolero inició su labor en YPF en la década de los 90 y luego se desempeñó en distintas empresas del mismo rubro como Pecom y Pluspetrol, compañía de la cual fue vicepresidente hasta su arribo a la política a mediados de la década pasada y donde contó con la ayuda de su mano derecha, Logaldo, quien lo asesoró para ser candidato para ser candidato por Cambiemos en Capitán Sarmiento, en donde perdió por 300 votos frente a Óscar Ostoich, histórico jefe comunal de la ciudad bonaerense.
Durante la presidencia de Macri, quien fue ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, lo convocó para ocupar el cargo de Director de Vialidad Nacional. En esa cargo, Iguacel saltó a la fama por denunciar judicialmente al empresario Lázaro Báez en la llamada Causa Vialidad.
Iguacel responsabilizó a Báez de ejecutar sobreprecios en la obra pública y por el cual la expresidenta y vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, fue a juicio. A su vez, el entonces funcionario macrista fue el ejecutor de la fallida obra del puente Bypass de Luján del ramal Mercedes del Tren Sarmiento, un proyecto que debió desistir de avanzar por los errores cometidos en la medición y que tuvo un costo de 1.200 millones de pesos (68 millones de dólares al valor oficial de 2017).
En 2018, Macri lo designó secretario de Energía en reemplazo de Juan José Aranguren. En su paso por ese cargo, aplicó un aumento del 30% a las tarifas y fue expulsado del gobierno tras proponer aumentos retroactivos a las tarifas del gas.
Pese a su desempeño errático por la función pública, Iguacel se postuló en 2019 una vez más para aspirar a la intendencia de Capitán Sarmiento. Al imponerse en las urnas, fue uno de los pocos ex funcionarios del PRO, junto a Néstor Grindetti en Lanús, que pudo imponerse en la provincia de Buenos Aires tras la derrota sufrida por María Eugenia Vidal frente a Axel Kicillof.
En Capital Sarmiento, Iguacel presentó como un hito de gestión la reducción de 100 tasas municipales, la eliminación de «cargos políticos» y la habilitación de negocios durante la etapa más dura de la cuarentena por la pandemia de Covid-19.
«Cuando vos le decís a alguien que tiene que pagar 50 por un servicio que siente que el municipio no le da, y encima esa persona tiene 20, directamente no paga. Si ajustás el valor a lo que puede pagar y le mostrás que hay una contraprestación asociada, la gente ve el beneficio de estar en regla y termina recaudando más», dijo en 2020 en declaraciones a La Nación.
En 2023, Iguacel apareció entre distintos dirigentes del PRO como posible candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires, pero su elevado grado de desconocimiento y la interna entre los candidatos de Juntos por el Cambio, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, lo hicieron correrse de la meta por el sillón de Rocha.
Tras las elecciones de 2023, en donde su aliada política, Fernanda Astorino Hurtado obtuvo una victoria por más de 53% en la localidad del norte bonaerense, Iguacel fue uno de los tantos dirigentes del PRO que fueron ofrecidos por Macri a Milei para ocupar la cartera de Energía y la presidencia de YPF, actualmente a cargo de Eduardo Rodríguez Chirillo y Horacio Marín, respectivamente.
No obstante, su nuevo rol como ejecutivo de una de las primeras empresas que aprovechando la política de desregulación económica llevada adelante por el gobierno nacional lo sitúa en un lugar preponderante no solo en el sector económico sino también como un jugador dentro de la posible alianza entre el PRO y La Libertad Avanza (LLA).
Tremenda vuelta a nuestra constitución alberdiana. Ahora depende de nosotros. Se abrió la jaula. Pymes, comerciantes, trabajadores, grandes empresas, emprendedores: A VOLAR ¡Viva la libertad! pic.twitter.com/1yTGu2NIWK
— Javier Iguacel (@JavierJiguacel) December 21, 2023
«Esperamos competir algún día con los gigantes de hoy que nacieron como nosotros hace años. Lo haremos innovando, con tecnología y mucha pasión por crear prosperidad en nuestra bendita tierra», expresó Iguacel acerca de su próspera empresa petrolera que en forma sorpresiva gana terreno, y pozos, beneficiado por la YPF de Milei.