El Presidente cuestionó también las protestas en contra de la medida: «Puede ser que haya gente que sufre el Síndrome de Estocolmo, están enamorados del modelo que los empobrece».
El presidente Javier Milei defendió este jueves el decreto de necesidad y urgencia (DNU) anunciado anoche, dijo que la norma fue establecida «en favor de la gente«, anticipó que se anunciarán más reformas en los próximos días y cuestionó a los ciudadanos que manifestaron su rechazo a la medida a través de cacerolazos y una manifestación en la Plaza Congreso.
«Es en favor de la gente. Busca incrementar el bienestar de las personas y los argentinos», dijo Milei en una entrevista que brindó por la mañana a Radio Rivadavia, en sus primeras declaraciones públicas tras el mensaje en cadena nacional que ofreció para presentar el DNU, que establece una profunda desregulación de la economía, deroga múltiples leyes y normativas y apunta a avanzar en la privatización de empresas públicas.
«Les aviso que viene más, hay más; pronto se van a enterar», afirmó el mandatario y agregó que -según tienen estudiado- hay «380 mil regulaciones» que «traban el funcionamiento» económico argentino.
Ante diversas versiones periodísticas, el Presidente aclaró que la nueva normativa «ya está en vigencia» y dijo que «no hace falta» sacar otra normativa con esa aclaración: «Cuando sale un DNU significa que ya está vigente. No hace falta sacar otro. Ya está en vigencia», explicó.
En tanto, el jefe de Estado reiteró que en breve el Poder Ejecutivo «va llamar a sesiones extraordinarias en el Congreso».
Por otro parte, Milei cuestionó las manifestaciones de rechazo que se produjeron entre la noche del miércoles y la madrugada del jueves, con cacerolazos y una masiva protesta en la Plaza del Congreso, y dijo que esos ciudadanos autoconvocados están «abrazados y enamorados del modelo que los empobrece».
«Puede ser que haya gente que sufre el Síndrome de Estocolmo. Están abrazados y enamorados del modelo que los empobrece. Hay gente que mira con nostalgia, amor y cariño al comunismo», dijo Milei.
Luego, salió al cruce de cuestionamientos opositores al DNU, afirmó que «la república está en riesgo con populismo, no con libertad» y que lo presentado anoche representa «el espíritu alberdiano» que inspiró la primera Constitución Nacional.
Al ser consultado sobre el impacto en la clase media, el Presidente destacó que ese segmento de la población «se va a estar beneficiando con la baja de la inflación» y agregó que con las reformas «va a conseguir un mejor trabajo».
Sobre las limitaciones al derecho a huelga, aclaró que se pueden «hacer paros» pero puso de ejemplo el caso de la educación al decir que ese es «el eje central del futuro» y que «no puede ser que se pierdan días de clase, ya que es irreparable».
Al ser consultado sobre el cambio de tipo societario de las empresas públicas, que con el DNU fueron transformadas en Sociedades Anónimas, evitó decir cual intentará privatizar en primer turno, pero destacó la incorporación de una «clausula antiboicot».
Finalmente, sobre las reformas en materia laboral, dijo que «lo que se ataca en el DNU es todo el tema de las multas, lo que hace que un despido sea extravagantemente caro, y es la industria del juicio. Cuando elimines esa carga, va a haber más empleo».
Sobre el Protocolo antipiquete
En otro pasaje el Presidente aseguró que fue «extremadamente positivo» el balance de la implementación del protocolo de orden público, que se puso en marcha el miércoles durante la protesta organizada por la Unidad Piquetera, y destacó que «en ningún momento se perdió el control de la calle».
«El balance fue extremadamente positivo, fue una acción conjunta entre el Ministerio de Seguridad, de Capital Humano y de Infraestructura. Dato contundente: hubo más denuncias que manifestantes. Poco más de 10 mil denuncias frente a, con suerte, se estimaban 3 mil manifestantes», dijo Milei en una entrevista que brindó a radio Rivadavia.
En ese sentido, estimó que fue positivo advertirle «a la gente que el que corta no cobra. Se le aclaró que nadie podía amenazarlos con perder el plan si no iban a la marcha».
«Toda esa gente decidió acatar las normas, entender cómo funciona la asistencia en un marco de libertad y orden, eso le diezmó la cantidad de asistentes», agregó.
Además, señaló que el corte «duró menos de 5 minutos» y que el resto de la Ciudad «funcionó perfecto».
«Mirá los videos comparados de lo que eran las marchas anteriores, no hubo ni un corte significativo. Cuando estás ahí, quizá te conviene flexibilizar un poco para que no se te genere un embudo», explicó.
Respecto a su participación en la supervisión del operativo, subrayó que él avala «totalmente» esta política y reiteró: «El que las hace, las paga».
Fuente: Télam.