«El lugar (donde se hizo el acto, nrd.) nos quedó chico. Más de 10 mil cordobeses y cordobesas acompañando a Alberto», aseguró.
«Estamos contentos porque en pocos días hemos recorrido una enorme cantidad de lugares, lo hemos hecho boca a boca, mirando a los ojos, dando las manos, los abrazos», manifestó.
En ese sentido, Fernández remarcó que «no golpeamos ningún asfalto para descubrir que la realidad estaba en el sufrimiento de nuestros jubilados, en la desesperanza de nuestros empresarios y pequeños productores, y también en esta enorme expectativa que tienen los trabajadores en este modelo de poder recuperar la seguridad de que mañana tienen el empleo en Córdoba también».
En cuanto a la orientación de voto cordobés el domingo próximo, el político remarcó que lo que se percibe en la calle, «a pesar de la apatía que también el neoliberalismo produce en la gente y en la política, es una gran reacción».
«Creemos que vamos a tener un resultado y que, esta vez, cuando visitemos Buenos Aires o un periodista nos entreviste, no nos diga ‘otra vez Macri ganó por los cordobeses'».
No obstante, Fernández recordó que «parte del gobierno provincial no ve con desagrado a Macri y eso es una verdad, no una ofensa».
Por ese motivo, la situación para los intendentes de Córdoba se complica, pues «es difícil -dijo- sostener para un jefe comunal, que ve cara a cara que es lo que pasa, que ve que un jubilado para los remedios o para comer».
«He visitado a muchos intendentes y a escondidas nos han atendido, se han visto presionados a no hacer una campaña abierta; es una lástima para la democracia, es una lástima para el peronismo de Córdoba o para los radicales de Córdoba actuar bajo las presiones que están actuando, pero en el cuarto oscuro esperemos que el pueblo de Córdoba acompañe integralmente», completó.
Fuente: Salvemos Kamchatka – FM La Patriada.