El Presidente inauguró el III Foro Mundial de Derechos Humanos en el Centro Cultural Kirchner.
El presidente Alberto Fernández cuestionó al poder judicial que está “siendo laxo con las condenas de los genocidas” que actuaron durante la última dictadura cívico militar en Argentina y señaló que es “el único poder que no se ha reformado en 40 años” de democracia, al inaugurar el III Foro Mundial de Derechos Humanos en el Centro Cultural Kirchner (CCK).
Además, aseguró que “las democracias crujen frente a los poderes concentrados” y llamó a organizarse “bajo la bandera de los derechos humanos para que las democracias sean instrumentos de igualdad social”.
“El único poder que no se ha reformado en 40 años es el poder judicial. La sociedad sueña con un poder judicial que deje de actuar como el brazo ejecutor de los poderes fácticos de la Argentina”, aseguró Fernández.
Y consideró que “en algunos lugares el Poder Judicial argentino está siendo laxo con las condenas de los genocidas” que actuaron en la dictadura militar de los años 70.
“Es necesario decirlo una vez más: cada represor juzgado debe cumplir su condena en una cárcel común, no tiene beneficio de la pena de ningún tipo, incluida la prisión domiciliaria”, indicó el jefe de Estado.
En ese sentido, destacó que “el pueblo argentino ha hecho de los derechos humanos una política de Estado”.
Además, afirmó: “El neoliberalismo está atentando ahora mismo contra los pilares de la vida común tal como la conocemos. Lo vimos en Bolivia con Evo (Morales) y lo vimos en Brasil con Lula (Da Silva), lo vimos en Ecuador con el querido expresidente (Rafael) Correa, lo vemos en Argentina con Cristina Fernández de Kirchner”.
En ese marco, el Mandatario convocó a “un acto de desobediencia en nombre de la vida” y “contra la resignación, el desánimo y los destinos inalterables” para resolver “las injusticias y desigualdades”.
“Les propongo un acto de soberanía intelectual para recuperar una imagen del porvenir, pare recuperar el derecho a la esperanza, para tener un horizonte donde encontrarnos dignos y felices. Sabemos que el viaje es largo, pero también sabemos que mañana es mejor”, concluyó.
Por su parte, Taty Almeida, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, señaló que “tras 40 años la democracia hay que cuidarla, fortalecerla y defenderla, porque costó mucha sangre lograrla”.
Y remarcó que “hay que exigir una democracia, por ejemplo, sin presos políticos, y un poder sin mafia judicial”, además de fustigar que “este partido judicial no siga investigando el atentado a la querida vicepresidenta” Cristina Kirchner.
En tanto, el Premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, expresó que “si se violan los derechos humanos las democracias se debilitan y dejan de ser democracias”, pidió “una reforma judicial” y “no seguir con jueces cómplices”, y criticó “el golpe militar en Perú”.
Planteó la idea de “buscar la unidad en la diversidad, con objetivos comunes” y consideró que el Foro “es el lugar para hacerlo”.
“No me quiero olvidar a los hermanos de los pueblos originarios. No les pueden quitar la tierra, no nos pueden marginar”, remarcó, y subrayó “la democracia es derecho e igualdad para todos y todas”, que “no se regala, se construye”.
Para Pérez Esquivel, “hay que profundizar la memoria porque los pueblos que pierden la memoria vuelven a cometer los mismos errores, o peores todavía”.
Por el lado del Gobierno estuvieron presentes los ministros de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Santiago Cafiero; del Interior, Eduardo de Pedro; de Justicia, Martín Soria; de Mujeres, Géneros y Diversidad, Ayelén Mazzina; y de Cultura, Tristán Bauer; los secretarios General de la Presidencia, Julio Vitobello; y de Asuntos Estratégicos de la Presidencia, Mercedes Marcó del Pont; y la asesora presidencial, Cecilia Nicolini.
También asistieron los exmandatarios de Bolivia, Evo Morales; de Colombia, Ernesto Samper; de Ecuador, Rafael Correa y de España, José Luis Rodríguez Zapatero.
El Foro se desarrollará hasta el viernes próximo en cuatro sedes en simultáneo: el Espacio Memoria exEsma; el CCK, la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño (FADU), y la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA).
Fuente: Télam