Los datos relevados además muestran que si se toma únicamente a la industria manufacturera, el índice totaliza 46,3 puntos, frente a los 48,3 del mes anterior, es decir, la actividad en las fábricas se está contrayendo y alcanzó un mínimo en seis meses.
En tanto, el índice PMI de servicios se ubicó en 54,1 puntos gracias a una demanda aún robusta y un redireccionamiento del gasto de consumidores, quienes se alejan de la compra de bienes durables.
El empleo sigue creciendo en junio
Según Chris Williamson, economista en jefe en S&P Global, los números son “consistentes con un PBI creciendo a un ritmo del 1,7%”.
“El crecimiento sigue dependiente en el gasto en servicios. La pregunta que hay es cuan resiliente será su crecimiento frente a la caída de la industria, y el efecto retardado de las subas de tasas de la Reserva Federal (FED)”, indicó.
El titular de la FED, Jerome Powell anticipó esta semana que habrá más subas de tasas en lo que queda del año, rompiendo la expectativa de un cierre al ciclo alcista tras la pausa que dispuso la FED en la reunión de este mes.
“Toda suba de tasas que se añada obviamente tendrá un efecto negativo en la industria, que es especialmente susceptible a los cambios en los costos de financiación”, agregó Williamson.
Una situación similar se da en las economías europeas: el índice PMI de la Eurozona registró en mayo un mínimo en cinco meses (50,3 puntos), afectado por el retroceso en industrias como la francesa y la alemana.
El estancamiento dependerá, en parte, de hasta cuándo seguirá la FED con su ajuste monetario, que se vincula con la evolución de la inflación.
“Es alentador que el ritmo de la inflación de bienes y servicios está cayendo al mínimo desde fines de 2020, lo cual es un signo de que la FED está ganado su batalla contra la inflación”, analizó Williamson.
Según los economistas, pese a los vientos en contra Estados Unidos evitaría –por poco- una recesión este año.
El Producto Bruto Interno (PBI) solamente entraría en contracción en los últimos tres meses del año, con un estancamiento en el tercer trimestre aunque no será un retroceso, según indicaban las previsiones iniciales.
Una encuesta realizada por la agencia de noticias Bloomberg a 71 economistas entre el 16 y el 21 de junio, señala que los especialistas ahora esperan una mejor evolución del crecimiento estadounidense en lo que queda del año, dado el fuerte consumo de los hogares; al tiempo que revisaron ligeramente a la baja las expectativas para 2024.
Como punto negativo, los analistas modificaron al alza las estimaciones de inflación para el año próximo, en línea con las previsiones de la FED.
Del mismo modo, prevén que la entidad monetaria aumentará una vez más las tasas dejándola en un rango de 5,25% a 5,5%, para luego recortarla a principios de 2024 en un cuarto de punto.