En un diálogo con FM La Patriada, el ensayista y docente universitario Alejandro Kaufman repasó varios temas que tensionan la compleja coyuntura argentina, como la agresividad impulsada desde la oposición en sus marchas y la reciente salida del ministro de Salud, Ginés González García.
Hace poco más de una semana, el presidente Alberto Fernández le pidió la renuncia al entonces ministro de Salud luego de que trascendiera que autorizó la vacunación a allegados que no se habían registrado de manera formal en el operativo.
Con respecto a las marchas opositoras del sábado pasado, en las que se vieron bolsas mortuorias colgadas en la reja de la Casa Rosada, Kaufman consideró que tienen un lado estético.
«Por el lado estético imitan siempre a los movimientos populares, como hace siempre el fascismo. La gente se olvida, y es un olvido muy gravoso que el fascismo y el nazismo se llamaban socialismo. Eran lo mismo que aquello que venían a exterminar», explicó
«Ellos también protestan, son democráticos, marchan. La democracia es el juego en que, cuando funciona, eso se atenúa, pero no desaparece», advirtió el ensayista.
Para Kaufman, además, «el punto principal de las bolsas no es sólo todo lo que se está diciendo, que también es cierto pero que es menor respecto de que están culpabilizando a un gobierno peronista de ser asesino, es decir, de haber desviado vacunas de las personas destinatarias a personas privilegiadas y, que por ese motivo, habrían muerto. Lo cual no es cierto».
En ese sentido, enfatizó en el hecho de que la mayor gravedad radica en «admitir que hay una culpa», y también consideró que «Ginés tuvo que renunciar por un falso motivo».
Porque, según el docente universitario, «no hay ninguna culpa, no hay ningún delito ni moral ni nada. Lo que pasó con (Horacio) Verbitsky no es nada. Esto es lo que hay que discutir».
Fuente: Todos En Cuero – FM La Patriada.