«Necesitamos que se investigue la vinculación del grupo de Revolución Federal y la banda de los copitos», solicitó Agustín Rossi, tras la detención de ayer de cuatro referentes del autodenominado espacio Revolución Federal, en el marco de la causa judicial en la que se los investiga por impulsar acciones violentas contra dirigentes políticos e instar a la posibilidad de un atentado contra la expresidenta.
El interventor de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) pidió que la justicia «continúe» profundizando la causa que se lleva adelante por el intento de magnicidio de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, al tiempo que alertó por «la aparición de otros grupos de extrema derecha».
Ayer, la justicia detuvo a cuatro referentes del espacio de ultraderecha Revolución Federal: Jonathan Ezequiel Morel, referente y vocero de Revolución Federal, y los integrantes de ese grupo, Leonardo Franco Sosa, Gastón Ezequiel Guerra y Sabrina Basile, quienes serán indagados hoy en forma virtual.
La causa
Uno de los elementos que fueron considerados por el juzgado y la fiscalía son los mensajes publicados por los acusados en sus redes sociales, sus expresiones en medios de comunicación y las propuestas que realizaron en diálogos que transmitieron por Twitter Space, información que fue presentada en el expediente por el interventor de la AFI.
«Presentamos la denuncia a partir de una conversación que vimos en Twitter donde participaba Morel y otros», explicó hoy Rossi. Se trata de una de las charlas titulada «Hay que pudrirla», durante la cual el líder de la agrupación proponía infiltrarse entre la militancia kirchnerista que manifestaba su apoyo a la Vicepresidenta en la puerta de su casa, para llevar a cabo un ataque, algo que efectivamente ocurrió cinco días después cuando Fernando Sabag Montiel intentó asesinarla.
En ese sentido, advirtió que entre las conversaciones de los participantes de ese grupo «hay amenazas muy claras a Cristina Kirchner, Máximo Kirchner y el presidente de la Nación».
«Debemos estar muy atentos a la aparición de otros grupos de extrema derecha», alertó Rossi y consideró que «el Estado, como sociedad, hace muy bien en llevar la calificación e investigación de la causa hacia donde la están llevando».
Tras pedir que se investigue la relación entre ese sector y la banda que ejecutó el atentado a la Vicepresidenta, el dirigente santafesino afirmó que «la justicia no debe privarse de la posibilidad de seguir investigando el intento de asesinato a Cristina Kirchner porque hay elementos para hacerlo».
Cristina, querellante
En el escrito que presentó la Vicepresidenta ante el juez Martínez de Giorgi para ser querellante en la causa, puso de manifiesto la conexidad entre el espacio Revolución Federal y el intento de asesinato contra ella.
«Es probable que el accionar del grupo no se limitara a amenazas, instigaciones y preparación de delitos en abstracto, sino que haya participado específicamente en el intento de atentado en mi contra», expresó en el pedido para ser aceptada como querellante, decisión adoptada por el magistrado este jueves.
La alerta ante el avance de la derecha
Por otra parte, Rossi apuntó al PRO y su presidenta Patricia Bullrich por su postura adoptada luego del intento de magnicidio el pasado 1° de septiembre en el barrio porteño de Recoleta.
«El principal partido de la oposición no se manifestó en contra del intento de asesinato a la Vicepresidenta y eso es grave», enfatizó.
En otro tramo de la entrevista radial, el interventor de la AFI reiteró: «Tenemos que tener mucha atención con los grupos extremistas de derecha porque empiezan a tener un crecimiento».
Para los investigadores, las consignas y manifestaciones violentas protagonizadas por Revolución Federal desde mayo de este año pudieron haber funcionado como «caldo de cultivo, como el discurso de odio que desencadenó» el intento de asesinato de la Vicepresidenta.
Con información de Agencia Télam