Las compañías petroleras definieron que la inversión, de unos 30.000 millones de dólares, se lleve adelante en la localidad de Punta Colorada y no en Bahía Blanca, como se había analizado en un principio.
La planta conjunta de GNL entre YPF y la estatal malaya Petronas, cuya construcción demandará una inversión de 30.000 millones de dólares, se construirá en la localidad de Punta Colorada, en Río Negro, y no en la bonaerense Bahía Blanca, el otro lugar que estaba en disputa.
La decisión fue tomada por las empresas teniendo en cuenta que mientras Río Negro ya adhirió al régimen de grandes inversiones RIGI, la provincia de Buenos Aires desestimó esa posibilidad y propuso un esquema propio para garantizar la presencia de empresas internacionales en el principal distrito del país.
Según se definió, la planta estará ubicada en la zona de Punta Colorada, en la localidad rionegrina de Sierra Grande donde también se llevará a cabo la puesta en valor y modernización de un viejo puerto en desuso con salida al océano Atlántico, informó la agencia Noticias Argentinas.
Tras un estudio encargado a una consultora internacional, la elección que primó fue instalar la planta en Río Negro, por sobre la propuesta inicial de construirla en Bahía Blanca, provincia de Buenos Aires.
El gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, ya había adelantado este martes que hoy podría ser «un gran día para los patagónicos. El puerto en Río Negro será una gran oportunidad para la región», consideró.
Lo mismo había dicho el santacruceño Claudio Vidal, cuyo respaldo fue agradecido por el rionegrino Alberto Weretilnek.
Gracias gobernador @ClaudioVidalSer por su respaldo y su compromiso con el desarrollo de la Patagonia.
La planta de GNL en Río Negro no solo representa una oportunidad enorme de crecimiento económico y generación de empleo para nuestra región, sino también un acto de justicia… https://t.co/7nAzj2jUGQ
— Alberto Weretilneck (@Weretilneck) July 30, 2024
«La planta de GNL en Río Negro no solo representa una oportunidad enorme de crecimiento económico y generación de empleo para nuestra región, sino también un acto de justicia con nuestra Patagonia que tanto le ha dado a nuestro país. La historia nos enseñó que las decisiones deben ser tomadas en beneficio de todos, y esta es una oportunidad enorme para que por fin la Patagonia lidere un proyecto que traerá prosperidad y progreso para nuestros pueblos», indicó Weretilneck.
Y agregó: «Juntos, con unidad y determinación, vamos a cambiar la historia y asegurar que la riqueza de nuestra tierra sea aprovechada por nuestra gente. Sigamos avanzando con la convicción de que la Patagonia merece un lugar protagónico en el desarrollo de la Argentina».
En los últimos días, el ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco, había asegurado que la provincia de Buenos Aires contará con un régimen de impulso a las inversiones, en el marco de la puja con Río Negro por quedarse con la obra para construir una planta de licuefacción que harán YPF y Petronas, y que será la mayor inversión de la historia.
«Lo que va a hacer el gobernador de Buenos Aires (Axel Kicillof) es un régimen que regule la provincia», sostuvo Bianco.
Además, consideró que el hecho de que Río Negro adhiera al régimen de inversiones impulsado por el gobierno nocional (RIGI) «no implica ningún incentivo provincial. No implica nada».