El Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) expresó su «profunda preocupación por la parálisis casi total de todos los programas de ciencia y tecnología.
El Comité Ejecutivo del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) alertó «con gran preocupación sobre la grave situación del sistema científico del país» y advirtieron «la parálisis casi total de todos los programas» de la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología y la ausencia de una política para la ciencia, la innovación y el desarrollo del país.
En Argentina, expresó el CIN en un comunicado, «más del 70% de la producción científica se origina en el sistema universitario nacional y la totalidad de la formación doctoral de nuestros profesionales está a cargo de nuestras instituciones, que además contribuyen a financiar la mayoría de sus trabajos de investigación», sostuvo.
«Esta realidad posiciona a las universidades no solo como espacios de enseñanza, sino como motores fundamentales de la innovación, el desarrollo tecnológico y el avance del conocimiento. Sin embargo, el desfinanciamiento de la ciencia amenaza gravemente estas funciones, atentando contra el progreso de la Nación», indicó el Consejo Interuniversitario.
En ese sentido, detalló que, entre otras medidas, fueron cancelados los contratos con todas las grandes editoriales del mundo, se suspendieron casi la totalidad de las actividades vinculadas con el programa Raíces; se desfinanciaron, prácticamente, todos los programas de colaboración internacional y multilaterales de cooperación científico-tecnológica; y se eliminaron de hecho los sistemas nacionales de grandes equipamientos científicos.
«La crisis del sistema científico es grave y profunda. La falta de recursos para la investigación no solo limita la capacidad de las universidades para generar avances científicos, sino que, también, debilita la formación profesional», afirmó el CIN.
Y agregó: «La investigación científica no es un lujo ni un gasto prescindible: es una inversión estratégica para el desarrollo de la sociedad. Pero el desfinanciamiento de la ciencia no solo afecta a investigadores y docentes, sino que tiene consecuencias directas en la economía y el bienestar social».