La detenida por el intento de asesinato de la Vicepresidenta declaró haber escuchado que el diputado del PRO financiaba «para agitar y armar quilombo cerca de la casa de Cristina Kirchner».
Brenda Uliarte, detenida por el intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, declaró haber escuchado que el diputado del PRO Gerardo Milman «pagaba a varias personas para que participaran en manifestaciones».
A través de un escrito, Brenda Uliarte presentó la ampliación de su declaración indagatoria en la causa y aseguró escuchar que Milman buscaba con ello «generar disturbios y violencia alrededor de la residencia de Cristina Kirchner».
Además, sostuvo que su novio y principal acusado, el detenido Fernando Sabag Montiel, conocía a militantes de la agrupación Revolución Federal y le decía que alguien los financiaba.
«Había gente contactada al gobierno anti K, que pagaban para que vayamos a las marchas, y a los actos, en realidad le pagaban a él y el me llevaba a mí», señaló Uliarte en relación a Sabag Montiel en un texto que firmó en la cárcel de Ezeiza y quedó presentado ante el Tribunal Oral Federal N°6 que prepara el juicio en su contra.
La detenida por el intento de homicidio a Cristina Kirchner declaró que hoy en día vive «un infierno» como consecuencia del hecho perpetrado por Sabag Montiel y «sus decisiones». «El era parte de todo esto, yo no», agregó al destacar que Sabag Montiel conocía a los militantes de Revolución Federal.
«Yo no puedo asegurar que a él lo financiaran para que mate a alguien, pero en dos oportunidades él me contó que sí financiaban a Revolución Federal», agregó
Sobre el atentado del 1° de septiembre, Uliarte dijo no saber por qué Sabag Montiel le gatilló dos veces en la cabeza a la Vicepresidenta en la puerta de su domicilio.
«Yo no se porqué «Nando» (por Sabag Montiel) hizo esto, pero sí se que él no es capaz de organizar y hacer todo esto solo, claramente alguien está atrás. Yo nunca vi a Milman pero decían que le pagaba a varias personas para que participaran en manifestaciones y con ello generar disturbios y violencia alrededor de la residencia de Cristina Kirchner», escribió la joven, procesada como coautora del intento de magnicidio.
Uliarte detalló: «A ver, yo no digo que financiaron el atentado, pero si financiaban para agitar y armar quilombo. Y Carrizo sabe todo esto, pero él va a cubrir a Nando, porque no quiere tener quilombo con los de arriba, saben que hay peso pesado».
Gabriel Carrizo, tercer detenido en la causa, es el supuesto líder del grupo que vendía copos de nieve y que integraban Uliarte y Sabag Montiel.
La querella de la Vicepresidenta exigió a la jueza María Eugenia Capuchetti investigar la «pista Milman» por supuesta implicación del diputado radical en el intento de asesinato debido a su vinculación por medio de un testigo que declaró en la causa haber escuchado al legislador decir «cuando la maten voy a estar camino a la Costa».
Tras ese episodio, la Justicia pidió secuestrar el teléfono de una de las asesoras de Milman. A Carolina Gómez Mónaco le ordenaron borrar el contenido de su celular en una oficina que atribuyó a la candidata presidencial de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich.
Esta semana se reveló que el celular de Milman, entregado a la Justicia días atrás, se trató de un aparato nuevo, comprado después del atentado.
«Lo que ha hecho Milman al entregar un celular posterior al atentado y ocultar la existencia de otros tres dispositivos es una burla a la jueza, al fiscal y a la víctima. La única respuesta posible es la que se deriva del rigor de la ley», afirmaron los abogados de Fernández de Kirchner, informaron fuentes judiciales.
Fuente: Télam