En el lugar pudieron haber sido asesinadas y sepultadas clandestinamente víctimas de la represión en la última dictadura cívico militar.
Los restos de un auto aparecieron enterrados en el predio donde funcionó el Campo de Deportes de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA), un lugar en el que se sospecha pudieron haber sido asesinadas y sepultadas víctimas del centro clandestino que funcionó en el edificio lindero durante la última dictadura cívico militar.
Myriam Bregman, abogada y dirigente del PTS/Frente de Izquierda, dio a conocer en sus redes sociales el hallazgo del vehículo, un hecho que «reavivó el debate» acerca de que en el predio «los marinos quemaban los cuerpos de los detenidos desaparecidos que morían bajo tortura o llegaban muertos» al ese centro clandestino de la ESMA.
En el predio donde funcionó el Campo de Deportes de la Escuela de Mecánica de la Armada, recientemente se encontraron restos de un automóvil. Esto reavivó el debate, ya que en ese lugar los marinos quemaban los cuerpos de los detenidos desaparecidos que morían bajo tortura o… pic.twitter.com/G6Z4Kd154X
— Myriam Bregman (@myriambregman) April 28, 2025
El lugar, recordó Bregman, «pudo haber sido el destino», entre otros, del escritor y periodista Rodolfo Walsh, «de cuya hija soy abogada en la causa. A esta práctica macabra la llamaban ‘el asadito'», mencionó la abogada.
Al respecto, indicó que los terrenos del Campo de Deportes fueron entregados tiempo atrás al club River Plate «con algunas cláusulas de cuidado, pero la propia incorporación de las mismas en la cesión es el reconocimiento por parte del Estado de que allí puede haber restos humanos u otros elementos importantísimos en la búsqueda de memoria, verdad y justicia», mencionó Bregman.
Y agregó: «Con Patricia Walsh hemos recorrido ese lugar en una inspección ocular y exigido siempre que se preserve. Conocido este convenio con el club, sobrevivientes de la ESMA vienen exigiendo que no se realice y haciendo presentaciones en la causa que actualmente instruye el Dr. Ariel Lijo«, dijo acerca del juez federal al frente del caso..
«Esperamos que este hallazgo haga que la entrega de los terrenos se revierta inmediatamente. El Campo de Deportes es prueba judicial y debe ser preservado como lugar de memoria. Es urgente, es ahora, porque toda medida contraria alimenta las posturas negacionistas. La coherencia en los reclamos las destruye», afirmó Bregman.
Según el sitio Espacio Memoria y Derechos Humanos, los alumnos de la ESMA concurrían al Campo de Deportes para realizar competencias deportivas y recibían instrucción física y marinera. También se adiestraban los conscriptos y aspirantes asignados a infantería de marina en un régimen mucho más severo y específico para el combate.
El rol del predio durante la última dictadura se modificó, al punto de que algunos testimonios aseguran que en ese lugar eran incinerados los cadáveres de las personas que morían a manos del Grupo de Tareas: las que llegaban ya sin vida al centro clandestino, aquellas posiblemente ejecutadas en sus instalaciones y quienes sucumbían en las sesiones de tortura.
«Los testigos –ex alumnos, cabos y «colimbas»– consignaron a lo largo de los años y a través de testimonios el frecuente hallazgo de huesos y demás restos humanos en el lugar –algunos relataron que tras comentarlo con sus profesores de gimnasia fueron reprendidos hasta con brutales palizas–, subrayaron la presencia de camionetas verdes que llevaban «los cuerpos de detenidos muertos» y reiteraron la mención de esos «fuegos a la orilla del río», las hogueras avistadas al subir al tanque de agua y de otros lugares elevados, como las garitas de vigilancia cercanas», indicó Espacio Memoria.
