La santafesina Rocío Bonacci fue una de los seis legisladores que dialogaron con los represores en el penal de Ezeiza y admitió allí les pidieron recuperar la libertad pese a estar condenados por delitos de lesa humanidad.
La visita que semanas atrás hicieron seis diputados nacionales de La Libertad Avanza (LLA) a un grupo de genocidas de la última dictadura militar, entre los que se encontraba el represor Alfredo Astiz, tenía el aval del presidente de la Cámara baja, Martín Menem, y del gobierno nacional.
Así lo dijo la diputada por Santa Fe de LLA Rocío Bonacci, una de los seis legisladores libertarios que concurrieron al penal de máxima seguridad de Ezeiza para dialogar con Astiz y otros genocidas condenados por delitos de lesa humanidad.
«Recibí una invitación de un colega de bloque. Era una visita con un buen objetivo de fondo y aparentemente tenía el ok de Martín Menem y (de la) Casa Rosada. Todo lo que se pone en el grupo nuestro de legisladores es oficial. Todas las invitaciones son oficiales«, explicó Bonacci en una entrevista con el canal «Somos Rosario».
❗Más sobre las reuniones del gobierno de Milei y Villarruel con genocidas condenados.
Una diputada que participó reconoció que las acciones que realizan tienen la aprobación del presidente de la Cámara de Diputados y la Casa Rosada. pic.twitter.com/Unpweuxr3j— H.I.J.O.S. Capital (@hijos_capital) July 29, 2024
Bonacci, que compartió la entrevista televisiva en sus redes sociales, admitió que la charla con los represores tuvo relación con un pedido efectivo para obtener, al menos, el beneficio de la prisión domiciliaria por tener más de 70 años de edad, aunque la gran mayoría purgue condenas de reclusión perpetua por los delitos cometidos durante la última dictadura.
«Sí, una cuestión que se charló demasiado es que hay presos por crímenes de lesa humanidad que tienen más de 70 años. Ese fue básicamente el motivo central de la charla», indicó.
De todas formas, @rialjorge te dejo la entrevista entera 👇🏻 porque ese recorte esta sacado de contexto https://t.co/BP0tVkdJMC pic.twitter.com/YLN7FIHDet
— Rocío Belén Bonacci (@RocioBonacci) July 29, 2024
La legisladora, además, aseguró que fue víctima de «un engaño» por parte de su colega de bloque Beltrán Benedit, quien habría sido el organizador de la visita «humanitaria» a los represores.
«Yo hablé tres veces por teléfono con mi compañero de bloque y no entró más en detalle que en decir que una visita humanitaria, que era muy importante que fuéramos y que era muy lindo«, reveló.
Bonacci, oriunda de la localidad rosarina de Funes, tiene un tuit fijado desde el 25 de mayo: una foto con la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien reivindica el accionar de los crímenes de la dictadura y la llamada «memoria completa».
Benedit, por su parte, también es un legislador cercano a la vicepresidenta e integró la comitiva de diputados libertarios que viajó en un vehículo oficial de la Cámara baja hacia el penal de Ezeiza.
Además de Bonucci y Benedit, los restante legisladores fueron Lourdes Arrieta, Alida Ferreyra, Guillermo Montenegro y María Fernanda Araujo y Rocío Bonacci, todos del bloque político que responde al presidente Javier Milei.
Ellos se habrían reunido en el penal de Ezeiza con los represores Astiz, Carlos Suárez Mason, Ricardo Cavallo y Raúl Guglielminetti.
En el mismo penal se encuentran detenidos también Antonio Pernías, Adolfo Donda y Alberto González, quien, según el periodista Juan González, «fue pareja de Villarruel y su mentor, (que) escribió un libro que la vice firmó».
«Yo no participé activamente de la reunión. No comulgo con las ideas que propone Beltrán. No reivindico a estos genocidas de la época de la dictadura, pero sucede que dentro del penal no podés pasearte como si fuera un shopping. La comitiva estaba acompañada por un guardiacárcel y debía mantenerse unida», contó Bonacci sobre el encuentro con los represores.
Y agregó: «Cuando vi los nombres de los represores, me asusté. No digo que entre en shock porque soy muy respetuosa de las ideas de mis compañeros».
Ante el conocimiento de la visita de los legisladores, el jefe de bancada de Unión por la Patria (UxP), Germán Martínez, presentó días atrás un pedido de informes a Martín Menem para esclarecer los detalles del acontecimiento.
“Tal visita ha tenido un impacto altamente negativo en nuestra sociedad, debido a lo inusitado de la situación, toda vez que el pueblo argentino ha sabido sentar las bases de la democracia recuperada en los pilares de Memoria, Verdad y Justicia”, expresó el bloque kirchnerista en el comunicado.
Le pedimos al Presidente de la Cámara de Diputados información urgente.
📄⬇️ pic.twitter.com/L1UCfKnYp3
— GERMAN MARTINEZ (@gerpmartinez) July 24, 2024
Días atrás, dos agrupaciones que reúnen a familiares de ciudadanos franceses desaparecidos por la última dictadura denunciaron que la visita a Astiz tuvo la intención lograr su liberación de prisión.
En un comunicado titulado «¡Francia no olvida!«, las organizaciones «Familias de franceses desaparecidos en Chile y Argentina» y «Franceses Desaparecidos en Argentina» recordaron que Astiz, como oficial de la Marina argentina, «desempeñó un papel importante en la desaparición de las religiosas francesas Alice Domon y Léonie Duquet en diciembre de 1977″.
Las monjas fueron «capturadas y torturadas en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA)», y luego «arrojadas vivas al Río de la Plata» en los llamados «Vuelos de la muerte».