«Agradezco a todos», dijo ante la multitud que colmó desde una hora antes las puertas del centro médico, tras aparecer en silla de ruedas, con buen aspecto y sonriente.
El papa Francisco abandonó este domingo el Policlínico Gemelli de Roma, donde permaneció 38 días internado por una infección respiratoria y, tras recibir el alta médica, continuará su recuperación en la residencia de la Casa Santa Marta, en el Vaticano.
Francisco dejó el hospital, en cuyas puertas se congregaron decenas de personas y medios de comunicación, a bordo del pequeño vehículo utilitario que habitualmente usa para sus desplazamientos y que lo llevó hasta el Vaticano, donde se reunieron numerosos fieles para ver su reaparición en las pantallas colocadas en la plaza de San Pedro, informó la agencia de noticias EFE.
El pontífice argentino, de 88 años, salió del hospital poco después de asomarse a la ventana del departamento en el que pasó las últimas semanas, en su primera aparición pública para saludar y dar su bendición tras una internación en la que sufrió dos graves crisis respiratorias que pusieron su vida en peligro.
«Agradezco a todos«, dijo ante la multitud que colmó desde una hora antes las puertas del centro médico y las cámaras de televisión de medio mundo, tras aparecer en silla de ruedas, con buen aspecto y sonriente.
El texto del Angelus, sin embargo, volvió a ser difundido por escrito, como en las últimas semanas, dado que Francisco deberá continuar con su rehabilitación para poder recuperar la voz totalmente.
Se trata de la primera aparición pública de Jorge Bergoglio desde que el pasado 14 de febrero ingresó en el Gemelli por sus problemas de respiración, que resultaron deberse a una bronquitis por infección polimicrobiológica a la que se sumó una neumonía bilateral, y donde sufrió «dos episodios muy críticos que pusieron en peligro su vida», según sus médicos.
«En estos días he sentido tanto el apoyo de esta cercanía, especialmente a través de las oraciones con las que me acompañaron», declaró el pontífice este sábado en un mensaje desde el hospital.
El papa Francisco se mostró «entristecido» por los nuevos bombardeos israelíes en Gaza y pidió «el cese inmediato de las armas» y que se alcance «un alto el fuego definitivo», en un mensaje difundido este domingo tras el rezo del Ángelus.
«La situación humanitaria en la Franja vuelve a ser muy grave y requiere el compromiso urgente de las partes beligerantes y de la comunidad internacional», agregó Francisco.
